El valor comercial que en la actualidad tiene la página Web de una empresa hace esencial plantearse su correcta protección y la de todos los activos que en ella se reflejan pues se corre el riesgo de perder todo derecho sobre los mismos.
Derechos en mi web. Nombre de dominio.
Parece evidente que el primer paso es disponer de un dominio donde alojar dicha Web. El sentido común recomienda registrar un nombre de dominio que sea fácil de utilizar y sea representativo de su marca y del carácter de su empresa.
Derechos en mi web. Marca registrada.
Los nombres de dominio y los registros de marcas están íntimamente ligados por lo que es muy recomendable que el nombre de dominio coincida con una marca registrada en los territorios donde se comercializa. De este modo se podrá hacer valer un derecho anterior de uso exclusivo contra quienes intenten utilizar el nombre para comercializar productos y servicios similares tanto en la red como fuera de ella.
Estos registros de marcas se hacen extensibles a los logotipos, nombres de productos y servicios y todos los signos distintivos publicados en la Web.
Derechos en mi web. Copyright.
También es vital registrar del sitio web los elementos susceptibles que lo sustenten y que en el aparezcan por derecho de autor: Copyright. Este es el caso por ejemplo del software, el propio diseño, y todos los contenidos creativos como imágenes, textos, música y vídeos.
Derechos en mi web. Invenciones.
Debe tenerse en cuenta igualmente que las herramientas y soluciones técnicas en que se sustentan determinadas web pueden y deben protegerse como una invención, es decir, como una patente o como un modelo de utilidad. Este es por ejemplo el caso de los nuevos sistemas de comercio electrónico o de los motores de búsqueda.
Derechos en mi web. Bases de datos.
Especial trato tienen las bases de datos que pueden protegerse mediante derecho de autor o por legislaciones ¨sui generis¨ al respecto. Ley de protección de datos.
Derechos en mi web. Diseños industriales.
Los diseños gráficos y las imágenes originales de pantalla, las interfaces gráficas de usuario y el propio diseño de las páginas web pueden protegerse mediante la modalidad registral del diseño industrial.
Derechos en mi web. Secreto industrial.
Del mismo modo la figura jurídica del secreto industrial también tiene cabida en la correcta protección de una web para cubrir concretos aspectos confidenciales siempre y cuando no sean divulgados al público y la empresa haya tomado las medidas necesarias para mantenerlos en secreto. Este es el caso por ejemplo del código fuente, el código objeto, los algoritmos, los programas u otras descripciones técnicas, los gráficos de datos, los gráficos lógicos, los manuales de usuario, las estructuras de datos y el contenido de las bases de datos, etc.
Dada las múltiples variables que intervienen en la construcción de una buena pagina web una agencia de propiedad industrial como Protectia será el aliado ideal para asesorar e informar durante el proceso de creación y protección de su web, así como en su actualización y mejora.
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